Delirio carnal en el decimotercero

La vida de Mateo se ve alterada la noche en que decide huir de los azotes de su padre y recibe la visita de un ente extraterrestre, que, después de provocarle una de las sensaciones más placenteras que se pueden experimentar, decidirá acompañarlo el resto de su vida: una voz que nunca más dejará de oír por más que intente hacerla callar y que le pondrá en un sinfín de situaciones comprometidas; darán fe Raquel, su compañera de trabajo en el matadero; Irene, una de las participantes de La Hermandad Hedionda; Natalia, la reina áurea, y Natalarpía, una doble perversa; Cecilia, su ingenua prima, que se halla en plena crisis matrimonial. Pero sus problemas no dejarán de aumentar, sobre todo cuando la llegada de un segundo ente extraterrestre empiece a sembrar el caos. La clave de todo el enredo está en Calvino, el único que tiene «la cura» para devolver la apariencia humana a quienes la pierden. Por desgracia, administrarla puede ser un problema si la afectada se resiste y no es demasiado tarde. Por ello, el audaz protagonista tendrá que actuar con arrojo si no quiere que su virilidad sea arrancada de cuajo y el virus se extienda por todo el planeta. Esta biografía novelada, que narra los episodios más jocosos de la vida de un hombre presentado con seudónimo, es también una alocada historia en la que el autor arremete contra muchos de los prejuicios que convierten la existencia humana en una cárcel en la que poco a poco se van pudriendo el cuerpo, la mente y el alma. La única llave que puede liberarnos del encierro será la de la risa, incluso cuando todo esté perdido y la destrucción sea inminente.