Podríamos decir que Frederick Hole era un hombre luchador, pretencioso, emprendedor… una persona que se hizo a sí misma con el sueño de triunfar en el mundo del espectáculo gracias a sus títeres. Sin embargo, su desmedida ambición le hizo profanar la memoria de su madre, recibiendo por castigo una terrible maldición.
Su vida transcurrió entre desastres y desgracias, y tras su muerte, aunque había intentado encerrar aquella desdicha y sus muñecos en una mansión familiar, su descendencia heredó las propiedades y sus consecuencias.
Pero sus nietos, negando la realidad, convocaron la fiesta de graduación en la Mansión Hole pese a la oposición de su tío Darian, quien temía que se destapara la ira y el horror tras años de silencio. ¿Quieres ser uno de los invitados a la Mansión de los Juguetes?
«Una novela de misterio y terror plagada de secretos y giros inesperados, en la que siempre cabe ir más allá. ¡Adéntrate en una tétrica lectura!».