La senda del progreso

Anka es una joven búlgara con una trayectoria académica muy  prometedora. El relato se inicia con su llegada a Boston. La prestigiosa investigadora Olivia Coleman. del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), acepta la dirección de su tesis. Durante su estancia. Anka reivindica una economía plural que arranca con las aportaciones de los autores clásicos (Adam Smith, David Ricardo) y varios economistas heterodoxos del siglo xx (Schumpeter, Keynes, Minsky y Rodrik, entre otros). A lo largo de su aventura por tierras americanas, acompañarán a la joven tres figuras clave: Nikolay, su abuelo materno; Olivia, su mentora del MIT que la ayudará a encontrar su senda personal; y Albert, un viejo gruñón que malvive jugando al ajedrez en los alrededores de la plaza Harvard. Debate con ellos sobre el funcionamiento del capitalismo, las crisis económicas, los excesos de la globalización y la parálisis que sufre la Unión Europea. Anka reivindica las obras de algunos grandes economistas que fueron ignorados por la economía  neoclásica. Considera que no iremos muy lejos sin Europa, pero con esta Europa tampoco. Ella se  resiste a tirar la toalla porqué está convencida que otra Europa de rostro más humano es posible. Este relato no es una novela al uso, ni tampoco un ensayo acerca de las ideas de los economistas que fueron ignorados o tergiversados. Es fruto de la fusión entre una obra de ficción y un análisis crítico de las ideas económicas y el futuro del proyecto europeo. Te invitamos a compartir los sueños de esta joven que cruzó el Atlántico en busca de nuevas ideas.