Lilu

Ceres Bodas Alonso (Madrid, 1989) es escritora, pintora, bailarina, emprendedora y creativa. Graduada en Educación Infantil por la Universidad Rey Juan Carlos y especializada/máster en Pedagogía Montessori. Su creciente interés por el desarrollo de los niños, comportamientos, pensamientos y formas de actuación la llevó a construir su propia metodología de trabajo, creando su propia escuela y estableciendo una pedagogía alternativa a la convencional, donde los niños tuvieron la oportunidad de desarrollar al máximo sus potencialidades y capacidades propias, dando un servicio único y exclusivo, acompañándolos en cada hito y centrándose de manera individualizada en cada uno de ellos. Siempre ha apostado por una educación donde prima el amor, las emociones y la imaginación para contrarrestar la influencia de toda la tecnología que fomenta la pasividad en ellos, creando así sujetos independientes, autónomos y seguros de sí mismos. Todo esto, junto con sus prácticas y descubrimientos sobre crecimiento personal y desarrollo espiritual que ella mismo experimentó en los últimos años, la llevó a explorar otras formas de actuación para hacer llegar de una manera más profunda este mensaje a los corazones de los más pequeños y al mundo a través de los cuentos. La autora hace hincapié en que el fracaso emocional es uno de los mayores lastres de nuestra sociedad, ya que en la infancia se están sentando las bases de los futuros niños/as que tendrán que enfrentarse a problemas reales. Por ello, si no se les ofrecen las herramientas necesarias, enseñándoles a manejar positivamente sus emociones y su vida en general, fracasarán en muchos aspectos, ya sean laborales, familiares o sociales. Pero sobre todo fracasarán en el aspecto personal, porque serán individuos estresados, tristes, con problemas de depresión y ansiedad. Este relato es un mensaje de inspiración y una herramienta donde se enseña cómo cada individuo tiene el poder personal para conseguir crear su propia realidad y vivir una vida sin miedos ni angustias, pudiendo conseguir todos los objetivos y sueños que se propongan. Porque, sí, ¡la magia existe!