¿Quiénes somos?

Amor, odio, venganza, perdón, entrega, búsqueda, reencuentro, descubrimientos, aislamiento, huidas. Estas, llamémoslas circunstancias, que marcan el destino de cualquier ser humano, se encuentran en el día a día en cualquier parte del mundo. Ciertas pinceladas de amor venido de otras latitudes desconocidas por los empíricos y muy localizadas por los abiertos al saber y al pensamiento. Dudar es la puerta principal que nos lleva a donde no puede llegar el arraigado sin mesura a los valores terrenales. Esta novela no la he escrito para hablar de secretos y de conceptos místicos. Todo lo tratado en esta obra es tangible, incluso las emociones de los personajes. Los lugares donde acontecen los sucesivos hechos son previsibles y fácilmente imaginables. Los únicos secretos son los mismos personajes y sus reacciones. Secretos que dejan de serlo al despejar, mediante alguna sorpresa, las dudas que sobre ellos puedan transcurrir a través de la lectura. Novela dividida en tres partes. Los personajes de la primera, nada tienen que ver en principio con los personajes de la segunda. En cada una de las dos primeras partes la historia comienza y acaba. En la tercera, algunos personajes de las anteriores historias cruzan sus caminos y se encuentran para vivir nuevas secuencias. Personajes que entrelazan sus supuestas historias independientes y que descubren la relación que han tenido sin conocerse hasta el momento. Personajes que parecían habían acabado su trabajo en la obra y que vuelven a verse… para bien o para mal. Creo no equivocarme en que, en la novela, el sentimiento que vence es el amor sobre el odio. Un amor que está edulcorado de este amor que es más puro del que solemos utilizar. No por ello dejaremos de pasear por dramas, egoísmo, desprecios, asesinatos… Pero he intentado que el regusto que tenga el lector de esta obra sea el amor que desprende. Difícil parece mi empeño. Mi novela creo que es apta para mayores de once años. No es intoxicar, a esta edad, que descubra lo que hay fuera de su mundo que pronto lo dejará de ser. Y es hora de que descubra que entre el mal el amor vence… porque será la sensación con la que se quedará el lector cuando acabe de transitar por estas páginas. Descúbranlo.