Contemplar una noche estrellada, el disfrute de un paisaje natural desbordante, observar un extraordinario acontecimiento telúrico, provoca en nuestro interior un sentimiento de maravilla, sobrecogimiento y respeto. El espíritu se estremece y probablemente aparecen preguntas que exigen respuestas; no hay indiferencia.
Ensoñaciones parecidas debieron surgir en la joven mente de Spinoza cuando se enfrentó a lo incomprensible de la vida y el universo. La majestuosidad de la naturaleza, y del mismo hombre que puede comprenderla, provocó en él
un desafío existencial. Su asombro y pleitesía se transformó inexorablemente en una auscultación razonada y profunda para encontrar lo divino. La divinidad, al parecer, está fuera de nosotros, pero somos productos directos de ella y formamos parte de esa naturaleza inefable. Spinoza dedicó toda su vida a responder a estas interrogantes. Encontró, además, un filón muy rico, nuestra propia naturaleza (conocimiento de sí mismo) como material de estudio primero de un conjunto más grande como es el conocimiento del Cosmos y Dios. Descubrió que las sensaciones de alegría y tristeza son emociones básicas y con ellas elaboró un detallado catálogo de los afectos humanos. El estudio de las emociones le permitió explicar el pensamiento moral tradicional, la ética y la religión. Nos enseña que el conocimiento puede ser una vía de contacto y encuentro seguro con lo divino y, que está al alcance de cualquiera que desee aceptar el reto. Más tarde, con esfuerzo denodado, se lanzó a descubrir un pensamiento religioso universal que una, que no disgregue; no quería crear religiones que separasen las almas. Recogió los espíritus integradores de Maimónides (judío), de Averroes (musulmán), de Tomas de Aquino (cristiano) y los fortaleció en la construcción de una filosofía religiosa única compartida, independientemente del credo que cada uno profese personalmente. Utilizando el método geométrico, con sus axiomas, sentencias y teoremas, concibió postulados que se aproximan a la ciencia actual, casi inobjetables; su razonamiento matemático aguzado y certero deja caer respuestas cristalinas a todas estas preguntas existenciales. Su lógica metafísica es impecable, deslumbra por su desarrollo pausado, pero enérgico llegando finalmente a lo más intrincado, la concepción de lo inexplicable: Dios.
ISBN/13:
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Temática:
9788411892896
480
150x210
Tapa blanda con solapas
2023-08-23 10:13:33
Grupo Editorial Círculo Rojo SL
Español
Ensayos literarios (DNF)
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Miguel Ángel J. Aulestia M. Psiquiatra, sociólogo, psicoanalista, psicoterapeuta. Autor de los libros: El proceso de individuación y el continuo normalidad patología, tratado de psicología sobre el difícil proceso de convertirse en persona; Conocimiento filosófico de Dios, el primero de una zaga de varios libros que van desde el pensamiento clásico al contemporáneo. Spinoza: su pensamiento es el segundo. Los próximos libros están en preparación y continuarán con el estudio en profundidad del pensamiento de filósofos como Hume, Kant, Schopenhauer, Nietzsche, Wittgenstein y otros, analizando en especial sus concepciones de Dios, el comportamiento ético y el sentido de la existencia.
Para cualquier contacto su correo electrónico es: Miguelangel.Aulestia@hotmail.com
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